Ponencia

Etnografías de sazones: rutas y desvíos para la resignificación de los patrimonios culinarios payaneses.

Parte del Simposio:

SP.14: Etnografiar la transformación: géneros, patrimonios y rituales en Latinoamérica

Ponentes

Alejandra María Rodríguez Guarín

Docente

SALOMON RODRÍGUEZ GUARÍN

Docente Fundación Universitaria de Popayán

Investigación desarrollada bajo el enfoque metodológico etnográfico, durante los años 2019-2022, en el marco del proyecto de doctorado en antropología. A manera de receta, que requiera en ciertos momentos corrección de sabor, su principal objetivo fue explorar las tensiones alrededor de la pervivencia del patrimonio culinario en las cocinas de las plazas de mercado Barrio Bolívar y La Trece (Alfonso López) en Popayán (Cauca), lugares de alta significancia histórica, social, económica y política del departamento del Cauca, al ser los epicentros de acopio, distribución, transformación y consumo de alimentos locales-regionales y del suroccidente de Colombia, al tiempo que soportan la denominación de Popayán, como ciudad creativa de la gastronomía (Unesco, 2005). La cocción conllevo la incorporación de varios ingredientes, agregados desde los conocimientos previos y los nuevos aprendizajes. El trabajo etnográfico propició la apertura de caminos para conversar sobre patrimonio desde un lenguaje cotidiano, conectar con otros(as) a través de sus sensibilidades, habilidades y limitaciones como ser humano insertado en un horizonte de tradiciones y prácticas, que en gran medida le sorprenden y lo rebasan. La elaboración de la receta tuvo como ingredientes fundamentales, las tertulias, historias y diálogos profundos, permitiendo disponer sobre la mesa la contemplación de las ideas en contraposición con las teorías, y la experiencia vivencial con los cocineros y las cocineras, permitió decantar la dimensión teórica de la investigación en una materialidad simbólica y cultural. Así pues, desde el concepto antropológico de la memoria, se pone en tensión la vida en las plazas de mercado desde diferentes dimensiones; al concepto de la tradición se le vinculan las experiencias en las cocinas; y al ingrediente conceptual de los imaginarios, la recreación del saber y la sazón. La manera de abordarla, permitió recuperar un aspecto esencial de la etnografía, tal y como indica Suárez (2021), pensarse el dialogo entre la teoría y el trabajo de campo, es decir, repensar una antropología “con las manos sucias y la barriga llena”, que permite replantear el quehacer del antropólogo colombiano desde una perspectiva, que en ocasiones tienden a ser infravalorada, como es el pensar desde la vivencia directa de los participantes. Desde esta mirada, son precisamente las ocupaciones de las vidas de la gente con la que se trabaja, el soporte vital al patrimonio culinario; es de anotar, que dicho colectivo, se auto-perciben como comunidades de sustratos económicos humildes, provenientes de familias campesinas, étnicamente indígenas, afrodescendientes y mayoritariamente mestizas, y que su forma de aportar a la connotación de creativa es su labor constante en el lugar donde tejen el sentido de su vida, la plaza de mercado. Desde diversas técnicas participativas, se reflexionó acerca de los usos de los ingredientes tradicionales y poco usados, acerca del legado familiar, se recrearon preparaciones payanesas, que movilizaron conversaciones para su recuperación y preservación; se logró identificar la prevalencia, adaptaciones y cambios que han tenido dichos lugares, desde miradas institucionales y locales; finalmente, se plantean rutas y desvíos para la revitalización de los legados culinarios, en y desde las cocinas tradicionales.