En las últimas tres décadas la actividad minera metalífera en la Argentina ha cobrado un auge inusitado, convirtiéndose en el sexto complejo exportador generador de divisas del país. La puesta en producción de una decena de yacimientos (principalmente de oro y plata) ha generado la incorporación de más de once mil trabajadores/as contratados en forma directa por las empresas del sub-sector minero. La forma en que las empresas organizan el proceso de producción minera requiere numerosas tareas o labores de servicios para el mantenimiento y reparación de las maquinarias e infraestructura productiva (caminos, plantas industriales, talleres, etc.), así como también atender la reproducción diaria de los/as trabajadores/as que laboran y viven temporalmente en el sitio de producción (campamentos mineros, comedores, etc.). Estas tareas demandan numerosos trabajadores/as que también suelen trabajar y vivir en el mismos sitio productivo minero. Como estrategia económica de reducción de costos, las empresas mineras contratan a otras empresas especializadas en dichos tareas. En este sentido, miles de trabajadores/as contratistas han ingresado también a trabajar en la actividad minera.
El objetivo de este trabajo es analizar la forma en que se relacionan estos trabajadores en la minería metalífera actual en la Argentina. En particular, cómo experimentan esa desigualdad ambos grupos de trabajadores (los “propios” y los “contratistas”) en un caso concreto. Para ello se analiza el caso del yacimiento Veladero, ubicado en la cordillera de los Andes, en la provincia de San Juan. El método de análisis es etnográfico, basado en un trabajo de campo que incluyó la co-residencia y la observación por medio de la participación junto a los/as trabajadores/as en el sitio minero.
La principal hipótesis que guía este trabajo es que esta yuxtaposición en el mismo sitio de trabajo minero entre los/as trabajadores/as contratados por las empresas mineras y los/as trabajadores/as tercerizados/as se expresa en formas desiguales de acceso al trabajo en el sub-sector minero metalífero. Estos accesos desiguales se traducen en las condiciones de trabajo, contratos, salarios y encuadramientos sindicales, así como también en las formas de habitar los sitios de reproducción temporal en la mina y las formas de movilizarse geográficamente hacia allí.