La siguiente ponencia tiene como objetivo reflexionar sobre las categorías participativas dentro de la gestión de las áreas protegidas, particularmente basándonos en el primer acercamiento al campo en el Parque Nacional Calilegua (PNC) Depto. Ledesma, Jujuy, realizado en el marco de la beca doctoral cofinanciada entre APN y CONICET.
No exenta a la realidad de muchos otros Parques Nacionales, con la creación del PNC en el año 1979 fueron desalojados grupos de personas de las comunidades Kolla y Ava-guaraní que habitaban el territorio o hacían pastoreo trashumante y agricultura. Estos grupos luego del desalojo se asentaron en la periferia del PNC, en lo que se denomina zonas de amortiguamiento.
Los modelos de la conservación de la naturaleza se han ido transformando en el tiempo, especialmente a partir de la década de 1980, en respuesta a las críticas dirigidas al modelo tradicional que se basaba en los primeros Parques Nacionales creados a finales del siglo XIX. Estos cambios han dado lugar a enfoques de conservación más participativos que reconocen la importancia de involucrar a las comunidades locales en la administración y gobernanza de las Áreas Protegidas. En un contexto de reivindicaciones sociales y emergencia étnica, el modelo participativo surge como un intento de revertir las implicancias políticas y sociales de la conservación estricta.
Desde el año 2001, la APN impulsa nuevos lineamientos que están contenidos en el Plan de Gestión Interinstitucional, donde aparece con fuerza el mandato global del paradigma del desarrollo y se promueve el fortalecimiento del vínculo con las comunidades indígenas en cuanto a la temática de legislación, territorialidad y manejo de los recursos naturales. En este marco es que surgen en el PNC dos instancias que buscan incluir a las comunidades indígenas: la creación del sendero guaraní y el convenio con la comunidad Kolla para la implementación de guardaparques interculturales.
Desde una aproximación etnográfica buscaremos reflexionar sobre cómo fueron llevadas a cabo en la práctica estas instancias de participación, teniendo en cuenta los encuentros y desencuentros generados con la gestión institucional, planteando la necesidad de reflexionar sobre el lugar que tienen las comunidades en estos escenarios. La observación participante y las entrevistas realizadas a miembros de la gestión y de las comunidades Kolla y Ava -guaraní permiten un primer acercamiento a como se fueron construyendo estas instancias y qué implicancias políticas y territoriales tienen para cada comunidad.