Las presiones globales para aumentar la producción de alimentos y generar energía limpia en los países del Sur Global han generado complejos procesos de acaparamiento y despojo de tierras. América Latina es la región más desigual en términos de distribución de la tierra, y en Perú, los agronegocios más grandes, el 1% del total de productores, ocupa un tercio de la superficie agraria. Mi investigación analiza el acaparamiento de tierras y las desigualdades socioambientales en Perú desde la ecología política, combinando análisis cuantitativos y espaciales con entrevistas cualitativas e historias de vida para comprender cómo los agronegocios y las plantaciones de alimentos a gran escala en la costa de Perú se entrelazan con las vidas de inmigrantes y mujeres que atraviesan múltiples crisis, aumentando aún más las desigualdades. Para ello, analizo tres estudios de caso dentro del territorio construido por las plantaciones, o el “paisaje del agronegocio”: primero, uno donde las plantaciones compiten directamente con cooperativas y agricultores de pequeña escala; el segundo, donde los agricultores de subsistencia sobreviven a los efectos medioambientales del agronegocio y la escasez hídrica; y el tercero, en medio del desierto, donde migrantes de todo el Perú viven y trabajan para el agronegocio. Mis hallazgos demuestran cómo los efectos de los agronegocios se distribuyen de manera desigual a lo largo de la cadena de valor, dentro de los territorios y entre las personas, según clase, etnicidad y género. Desde hogares liderados por mujeres inmigrantes solteras que a menudo no tienen suficiente comida ni agua para vivir; a campos agrícolas con toneladas de desperdicios de alimentos que florecen a pesar de sostenerse en acuíferos sobreexplotados; a los supermercados europeos, donde se pueden encontrar y consumir productos agrícolas peruanos –todos estos procesos de acaparamiento de recursos aumentan las desigualdades a diferentes escalas. Finalmente, concluyo mi análisis discutiendo cómo un contexto de crisis ambientales, económicas y políticas afecta la vida la vida dentro de las plantaciones y de los territorios afectados por estas. Al hacerlo, abordo las dimensiones afectivas del acaparamiento de tierras: las luchas cotidianas y las formas de supervivencia, y las movilizaciones, protestas y manifestaciones políticas contra la agroindustria y sus efectos en los cuerpos racializados de migrantes indígenas. Esta investigación ayuda a ampliar el debate sobre las desigualdades en los sistemas alimentarios a nivel global, apoyando una visión crítica sobre la agenda de desarrollo agrícola del Perú y contribuyendo a debates más amplios sobre el acaparamiento global de tierras, el Platationoceno y el capitalismo extractivista.