Ponencia

Violencia en los sitios con vestigios arqueológicos en Xochimilco, Ciudad de México

Parte del Simposio:

SP.49: Violencias y desigualdades en las relaciones cielo-tierra: la astronomía cultural como abordaje emergente de disputas cosmopolíticas

Ponentes

Juan Rafael Zimbrón Romero

Seminario de Arqueoastronomía ENAH-UNAM

En el mes de diciembre del año 1991, subí al cerro Xochitepec a las puertas de Xochimilco y vi por primera vez la salida del Sol exactamente atrás del cráter del volcán Popocatépetl, marcando con ello el solsticio de invierno que en nuestro hemisferio norte es el 21 de diciembre de cada año, lo publique en la Revista Comercial «México desconocido» en diciembre de 1996, lo que invitó a que mucha gente comenzara a subir al cerro para ver el fenómeno, incluyendo a miembros de la «Mexicanidad», quienes forman un grupo fanático que promueve «nuestro pasado prehispánico», sin embargo aún sin explicación, a los pocos años del suceso, quemaron las cruces cristianas que los pobladores originarios del pueblo de Xochitepec colocaron para venerar el 3 de mayo de todos los años la llegada de la temporada de lluvia (culto sincrético), por lo que pidieron a los nuevos visitantes solares respetar las costumbres de los pobladores originales y hoy tratan de convivir ambos cultos.
Tenemos otro caso de violencia en esa misma Alcaldía de Xochimilco y esto es en el sitio arqueológico conocido como Cuahilama donde hay bellos relieves esculpidos por los xochimilcas antes del siglo XIV, cuyos temas tratados versan sobre la cosmovisión, el calendario, la agricultura, la caza, y la astronomía. Al comienzo del nuevo milenio fueron atacados con pintura, ocasionando daño permanente en algunos de ellos. Los agresores se dicen ser dueños de los predios que se encuentran en la cima del cerro y quieren vender para liberar la tierra y construir viviendas. En la actualidad el Instituto Nacional de Antropología e Historia ha realizado una intervención para la protección y limpieza de los vestigios y la Alcaldía de Xochimilco está trabajando para lograr la expropiación de las tierras para que por decreto presidencial se situara como Zona Arqueológica.