La ponencia pretende analizar cómo se representan y se repiensan los nuevos
procesos de orgánica política de las mujeres mapuche, comprendiendo su historización, sus contextos de producción y su locus de enunciación. Se interroga cómo el feminismo indígena mapuche decolonial pone en tensión al feminismo blanco, examinando las prácticas y los discursos de líderes y activistas mapuche.
Tanto las representaciones como los discursos femeninos indígenas en
las últimas décadas han ido cuestionando la construcción y la instalación
de las categorías Estado/Nación, discutiendo de esta forma la lógica raciona lista y progresista del «universalismo del concepto mujer», incorporando lo
real e imaginario de la raza, la etnia, la clase. A través de la tesis sobre la «Colo
nialidad de la democracia», que estipula que la democracia liberal existente en
Occidente fue posible solo por la fusión entre raza y género. Comprendiendo
este proceso llegamos a ver la confluencia del sistema heterosexista, así como
la desigualdad que engendra el sistema de género colonial moderno con el
capitalismo y la democracia liberal, los cuales han dependido de la sobre explotación de las mujeres indígenas (Mendoza, 2006).
Las voces del feminismo mapuche han ido registrando marcas, tanto de ruptura como de refundación —de narraciones y prácticas—, diferenciándose y apartándose de las posturas del feminismo blanco occidental, el cual contribuyó en los procesos de construcción de los estados nacionales latinoamericanos (Mendoza, 2006; Hill Collins, 2012; Millapán, 2012; Galindo, 2013).
La mujer-nación es la mujer tutelada por el Estado y, como «madre de la nación» —su misión reproductora—, el cuerpo de la mujer imaginaria se vuelve el cuerpo de la nación construida. Esto se ratifica con lo señalado por Bengoa «La Nación en todas las definiciones está ligada a un territorio, a la Tierra, a la femineidad mítica por excelencia. Pacha Mama, Ñuque Mapu, Madre Tierra, cuna de las naciones» (Bengoa, 1996: 78). Desde esta representación histórica, las «mujeres», en este caso específico mujer(es) indígenas y construidas desde la subalternidad, han ido cuestionando esta díada del estado-nación, abriendo un repertorio de saber cultural y político, que socava la lógica racionalista y progresista del «universalismo del concepto mujer», que esconde dentro de sí discursos de mujeres insatisfechas, al ser inventadas y construidas desde «lo blanco».