En Chile los asentamientos informales se constituyen en campos de intervención del gobierno, los cuales históricamente se han conceptualizado como territorios despolitizados y normalizados como sitios poblados por personas pobres o vulnerables (Abufhele, 2019).
En este escenario, en el año 2006 surge el Programa Quiero Mi Barrio (PQMB) del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, el cual promueve un proceso participativo e inclusivo en la recuperación de los espacios públicos, el equipamiento barrial y el fortalecimiento del tejido social. Este programa cuenta con tres ejes transversales que delinean el mejoramiento de los barrios: identidad, seguridad y medioambiente.
El PQMB cambia el enfoque de intervención gubernamental, pasando de un modelo de asistencia de “sujetos pasivos”, a centrarse en la promoción de la acción comunitaria como agente de cambio social (Campos Medina y Dupré, 2021). La intervención consiste en un conjunto de procedimientos enfocados en mediar el afecto, apego y cariño de los habitantes con su barrio para que, en función de esa afectación, se convierta en un agente productor de comunidad y sostenedor en el tiempo de la intervención desarrollada por el programa.
Si bien el PQMB propone un cambio de paradigma en la forma de interactuar entre el gobierno y los territorios, en el desarrollo empírico del programa coexisten resabios de los enfoques tradicionales de la política de la pobreza que antagonizan con el paradigma de la agencia comunitaria. Esto ocurre dado que el Programa sigue siendo una institución externa al barrio que busca incidir en las subjetividades de pobladores, y la forma en cómo se realicé dicha intervención puede potenciar la agencia, o bien transformar dicha subjetividad en un objeto más de intervención.
Quienes presentamos esta ponencia tuvimos la oportunidad de trabajar en tres proyectos asociados al PQMB entre los años 2018 y 2023, localizados en diversas ciudades de Chile: Quilpué, Viña del Mar y San Antonio. En dos de ellos el trabajo estuvo enfocado en apoyar al proceso de la reconstrucción de las memorias barriales (mediante talleres, un libro y una producción audiovisual), y en el tercero tuvo que ver con la realización de talleres socioambientales. Si bien todos estos territorios son diferentes, comparten algunas características en común: son parte de la Región de Valparaíso, están situados en los cerros, en ellos habitan gente mayor y coexisten problemáticas socioespaciales contingentes.
A partir de la sistematización de estos tres proyectos de intervención del PQMB realizados por las personas expositoras y el análisis operativo de la implementación del Programa queremos visibilizar las tensiones prácticas de éste, así como exponer sus límites y posibilidades. Lo anterior considerando el espectro metodológico que va desde las metodologías de la planificación racional (Allmendinger & Tewdwr‐Jones, 2005) hasta las metodologías afectivas y subjetivas que se enfocan en la emergencia de la prácticas creativas (Sandercock & Attili, 2010).