Esta ponencia problematiza el lugar que ocupan las experiencias colactantes de mujeres-madres afrouruguayas dentro de los postulados normativos que promueven la lactancia en la nación uruguaya. La colactancia refiere al amamantamiento por pecho directo entre una mujer-madre y un bebé que no ha sido engendrado por ella, aunque también incluye el intercambio informal de leche humana; ocurre de forma solidaria, y puede ser tanto una respuesta ante la imposibilidad que pueda atravesar una mujer-madre para lactar a su descendencia como una estrategia de ayuda mutua desplegada entre quienes deciden lactar conjuntamente a sus criaturas. En cierta medida, las formas de practicar y significar la colactancia en la comunidad afrouruguaya devienen del período colonial y del trabajo esclavo bajo el que muchas de las ancestras fueron forzadas a ejercer como nodrizas, pero también de los inicios del trabajo asalariado, cuando comercializaron su leche de forma relativamente libre; y si bien en esta presentación el foco analítico está puesto en el presente, el pasado sirve de marco para dimensionar la profundidad histórica de esta práctica social. Paralelamente, la lactancia humana, entendida como parte de la secuencia reproductiva, es un proceso social, económica y políticamente gestionado; y actualmente, se trata de un fenómeno regulado por organismos internacionales y nacionales que, en nombre de la promoción de la lactancia materna como forma de alimentación natural, moldean y restringen las lactancias humanas de formas específicas. En ese sentido, me interesa evidenciar que en Uruguay existe una normativa basada en el paradigma biomédico que cataloga a la colactancia como práctica riesgosa y que la excluye como posibilidad. Frente a ello, vale preguntarse qué nos puede decir la asociación normativa entre colactancia y riesgo acerca del lugar socialmente asignado a las mujeres de sectores populares, que históricamente la han practicado, como es el caso (no exclusivo) de las afrodescendientes.