Ponencia

Los winka, arümcó y la pampa ofendida. Agencias humanas y no-humanas en el desierto pampeano (Argentina)

Parte del Simposio:

SP.55: Antropologías de los desiertos, entre vacíos y abundancias

Ponentes

Antonela dos Santos

Universidad de Buenos Aires - CONICET

Argentina

Para el naciente Estado-nación argentino del siglo XIX, la figura del desierto ocupó un lugar central. Viajeros, intelectuales y científicos describieron los territorios desconocidos que estaban más allá de las fronteras sur y norte resaltando su inherente oposición a los valores de la civilización y el progreso. El proclamado vacío de cultura de estos espacios, así como el supuesto salvajismo preponderante en su naturaleza indómita y en la barbarie de sus ocupantes, dieron un cariz de necesidad a los planes de conquistar estos territorios para extender sobre ellos el orden, la razón y, mediante el trabajo, la prosperidad económica.
En esta ponencia buscaré adentrarme en una otra narrativa del desierto, según la cual tanto la actual aridez de los territorios del oeste de la provincia de La Pampa, en el centro de Argentina, como el despoblamiento de la región son productos de una diversidad de agencias, humores y voluntades humanas y no-humanas que desde comienzos del siglo XX transformaron las antaño “tierras de libertad y armonía” en “dunales invasores”. Para eso, recuperaré los pormenores de un relato titulado “El Arümco” recogido por Enrique Stieben en 1951 en lo que actualmente es la provincia de La Pampa, y algunas observaciones de mi trabajo de campo etnográfico con personas y familias ranqueles en la misma zona. Esto me permitirá describir cómo, según algunas perspectivas indígenas, fue la llegada del winka (no-indígena) la que produjo un desierto allí donde antes existía un espacio productivo de gran fertilidad. Su avaricia y el desconocimiento del entorno habrían resultado en prácticas de explotación desmedida de la tierra que provocaron que, o bien ésta se agotara y decidiera descansar, o bien se enojara y buscara venganza recrudeciendo las condiciones generales con vientos, heladas, sequías, etc. Estas mismas prácticas desconsideradas de ocupación winka del territorio son las que habrían conducido a que algunos seres no-humanos, siguiendo el derrotero de los humanos, también decidieran huir, provocando un vacío tanto biológico como social. Me interesa reflexionar sobre la complejidad de las agencias y las relaciones que cotidianamente hacen, rehacen o deshacen los territorios desertificados del oeste pampeano, y que tensionan su carácter natural, unidimensional y homogéneo.