El trabajo muestra las reflexiones posteriores a la conclusión de un proyecto de investigación-acción en torno a la violencia hacia las mujeres en un contexto cuya población es mayoritariamente indígena totonaca en la sierra norte del estado de Puebla en México. Se muestran los resultados y la propuesta de un protocolo de atención a la violencia construido en tres lenguas: totonaco, nahua y español, el cual está a disposición de autoridades y funcionarios(as) involucrados en los procesos de denuncia de las violencias. Las reflexiones intentan profundizar en los debates en torno al alcance de las investigaciones, aún de las que se proponen desde una mirada colaborativa y participativa situada en en la antropología feminista.