Ponencia

La Dictadura Civil-Militar y la refundación nacional: las fiestas oficiales y la nueva nación. 1975-1980

Parte del Simposio:

SP.7: Antropologías de las políticas culturales en nuestra América diversa

Ponentes

Agustín Silvera Bonomi

Universidad de la República. Uruguay.

El campo de estudios en políticas culturales es muy incipiente en Uruguay. Ha comenzado a afirmarse a partir de la creación del primer programa de postgrado en el área, la Maestría en Políticas Culturales en el Centro Universitario Regional Este de la Universidad de la República en el año 2019. Esto conlleva que a nivel nacional no existan ámbitos específicos como congresos u otro tipo de eventos académicos semejantes en el que se puedan intercambiar avances de investigación. Como es sabido es un campo interdisciplinario. Esta ponencia tiene por objetivo exponer avances de investigación de mi tesis de maestría (integro la segunda generación) que estoy desarrollando en el marco de dicho programa. Mi formación de grado es en Historia pero el tema objeto de la tesis tiene una marcada influencia antropológica, por lo que considero de gran relevancia para mi proceso de trabajo participar en este simposio. La ponencia tiene como propósito discutir la política cultural oficial del régimen civil-militar durante el lustro 1975-1980, definido por el politólogo Luis Eduardo González como el período de “ensayo fundacional” (González, 1984).
Se trata de focalizar el análisis en las prácticas festivas que la Dictadura permitió y promovió. Se procura analizar los discursos emanados por el poder político por medio de las festividades, en la apuesta constructiva del denominado por el régimen como “Nuevo orden”. Se pretenden abordar los enunciados políticos de la Dictadura a través de sus enclaves culturales, intentando comprender qué tipo de ciudadano se espera construir, centrando su espacio de análisis en un marco festivo, celebratorio y conmemorativo. Esta dimensión de la temática se relaciona estrechamente con los estudios antropológicos sobre ritualidad política.

Así pues, el trabajo centra su interés sobre lo permitido, lo oficial y lo concensuado. Un disparador interesante subyace de cuestionar la idea sobre la Dictadura como destructora de la cultura, dejando un vacío. Como plantea Aldo Marchesi (2009) cabe la interrogante para entender “¿qué puso la dictadura en su lugar?”.
Al considerar las fiestas como dispositivos complejos con propósitos creativos de sociedad (Pujol, 2006), dicho ensayo fundacional relacionado a lo festivo supuso discursos, símbolos, valores y prácticas emanados desde una esfera de poder que tuvo esa intención refundacional.
La categorización clásica de González delimitó al ensayo fundacional desde lo político (destitución del presidente Juan M. Bordaberry en 1976 y rechazo a la reforma constitucional autoritaria en plebiscito de 1980). Este trabajo pretende hacer foco en una dimensión cultural, por lo cual propone otra categoría temporal centrada en lo festivo, ritual, conmemorativo, enmarcadas en un complejo corpus con fuerte interés en lo propagandístico. Considerando un elemento central sobre la participación en esos eventos, el carácter voluntario o no coercitivo de la ciudadanía en tales espacios festivos. Con este propósito, el trabajo se interesa por las relaciones entre cultura y política, en la consagración de ciertos dispositivos. El programa festivo en el marco celebratorio y conmemorativo a partir del año 1975 comienza con el denominado “Año de la Orientalidad” despliega un cronograma que culmina con el “Mundialito del 80”.