Esta ponencia constituye un avance de investigación acerca de la incidencia de la maternidad en el trabajo y desarrollo profesional en mujeres que se emplean en empresas privadas del Gran Rosario, Argentina. Desde un posicionamiento teórico que entiende que los modos de producción no pueden estudiarse al margen de los modos de reproducción, se sostiene que la división sexual primaria del trabajo, referida al reparto por géneros del trabajo en un sentido amplio -el trabajo asalariado prescripto para los varones y el reproductivo a cargo de las mujeres- se traslapa al mercado de trabajo actual mediante una segregación sexual ocupacional -horizontal y vertical- en tanto las mujeres participan menos, lo hacen en determinadas áreas y en puestos de menor calificación.
Ante la vacancia de investigaciones y datos oficiales locales, se diseñó una metodología que, conjugando estrategias de diferente intensidad (encuesta y entrevistas), permitió caracterizar la segregación sexual ocupacional del sector empresarial privado de la región ligado a la producción e identificar el lugar que ocupa el trabajo reproductivo, como resultado de la maternidad, en dicha configuración.
Acerca de la segregación ocupacional se observó una marcada segmentación tanto vertical como horizontal, en tanto se halló que las mujeres constituyen poco más de un quinto de la fuerza de trabajo, que su presencia es minoritaria en la jerarquía ocupacional y que se concentran en las áreas ¨soft¨, siendo su presencia minoritaria o nula en las áreas centrales y estratégicas de las empresas.
Entre los motivos de esta configuración, se observó que los estereotipos de género basados en la domesticidad femenina definen determinadas profesiones y roles en el ámbito laboral, que implican un poder de decisión limitado y escaso margen para realizar aportaciones estratégicas y, por tanto, pocas posibilidades de ascender en la empresa. No obstante, y sin desatender la incidencia de estas representaciones, se identificó a la maternidad como el elemento central en la configuración del mercado de trabajo y de la carrera profesional laboral femenina, a raíz de la conjunción de dos aspectos estructurantes del trabajo en el capitalismo actual. Primero, se constata la persistencia de la división sexual primaria del trabajo que atribuye a las mujeres la responsabilidad del trabajo reproductivo, al tiempo que el colectivo masculino, el mercado y el Estado se desentienden del mismo. Esta desigual asignación de los cuidados coloca a las trabajadoras en un lugar de inequidad laboral con respecto a los varones, en tanto consume tiempo y espacio -material y subjetivo- en detrimento de la carrera profesional. Segundo, esta situación se agudiza en la modalidad laboral que impera en las organizaciones estudiadas, donde el management, como modelo de la flexibilización, requiere que sus trabajadores desplieguen un compromiso y disponibilidad total para con la empresa. Razón por la cual, son las mujeres, en tanto sustentadoras principales de cuidados, quienes tienen menos posibilidades de participar y desarrollarse profesionalmente en estas organizaciones laborales.