La historia de cabello rizado tiene un contexto lleno de discriminación, desprestigio, o categorizaciones malas , donde se le ha llamado de formas despectivos como cabello malo, greñudo, despeinado, desalineado, informal, etc. Hablando del mundo de la belleza está invisibilizado, los pocos métodos y servicios de cuidado se reservan para clases sociales medias a altas.
En la pandemia fue donde la gran mayoría tuvo que estar en casa, tener trabajos remotos donde las relaciones eran a través de una pantalla, donde muchos dejaron de cumplir con la “ética de vestimenta y arreglo” que eran reglas no escritas pero si de discriminacion obligando a alisarse el cabello para un trabajo presencial, así dejaron de querer cumplir con los estereotipos qué impone el área de trabajo.
Muchas mujeres dejaron las herramientas de calor y químicos para modificar su apariencia para encajar dentro de las normas. Los hombres se dejaron crecer el cabello luciendo más al natural. En conjunto redescubrieron su cabello rizado, ondulado o afro y que el cuidado del era totalmente distinto pero al mismo tiempo caro.
En la búsqueda de cómo cuidar su cabello se dieron cuenta que los productos y servicios para el cabello rizado son hasta el triple de caro qué para cabello lacio. Muchos salones emergentes especializados en cabello rizado sus precios rondan en los 100 dólares o más, siendo un lujo, algo que realmente es una necesidad.
El objetivo es comprender como las cabelleras rizadas siempre han estado en una violencia estetica donde se les pide o ser lacias y someterse a químicos tóxicos para su salud y gastar una mayor cantidad de dinero por un corte o productos cuando las cabelleras lacias no están sometidas a esa discriminación.
Están cambiando las formas de ver el cabello rizado hay empresas que tienen campañas de reclutamiento anti-discriminación, han surgido marcas económicas para el cuidado del cabello y salones de belleza con servicios más accesibles para todas las personas pero aun existe esta violencia estetica en la gran mayoría de los lugares.