Ponencia

Antropología económica en Colombia: encuentros de la economía y lo económico en la práctica antropológica institucional.

Parte del Simposio:

SP.11: Los umbrales de las antropologías propias en América Latina y el Caribe

Ponentes

Christian Camilo Hurtado Suarez

Universidad Nacional de Colombia

¿Se hizo antropología económica en Colombia?
La ponencia propone que a la luz de las definiciones y polémicas de la antropología económica metropolitana, fue poco lo que en Colombia se realizó en ese campo. Pero asumir por ello que no hubo antropología económica es analizar la experiencia institucional del país con lentes inadecuados.
Si se analiza la producción antropológica desde la forma en que problemas, teorías, conceptos y fenómenos “económicos” fueron tratados por antropólogos y antropólogas, el problema cambia por completo: la convergencia entre antropología y economía fue constante, adoptó trayectorias identificables en el tiempo y a nivel territorial, temático e incluso epistémico. En esa convergencia consiste la antropología económica, de hecho, ella es la base de las polémicas entre las escuelas metropolitanas de la subdisciplina.
Para demostrarlo, se analizaron los artículos de revistas de antropología institucional publicados entre 1944 – 1997. Se prestó atención a la forma en que antropología y economia se relacionan, el tratamiento y naturaleza de lo económico abordado en los artículos y la subordinación o integración que antropología y economía logran en cada estudio. De esto surgen estilos de antropología económica.
El transfondo de esos estilos es la naturaleza particular de la antropología y la economia como disciplinas en el país, lo cual ratifica la impronta del sur en la construcción ya no sólo de las antropologías, sino de sus subdisciplinas.
Así, la pregunta obtiene una nueva respuesta: si se hizo antropología económica en el país, pero esa antropología económica no se puede entender, ni se puede interpretar, si se piensa con las categorías de la antropología económica metropolitana. Ello en tanto los problemas y situaciones del Sur atraviesan sus disciplinas, marcan sus agendas y constituyen emplazamientos disciplinares propios. De facto, el estudio reivindica otra forma de pensar y relatar nuestra historia disciplinar.