El 5 de mayo de 2023, la OMS declaró que la COVID-19 ya no constituía una
“emergencia de salud pública de importancia internacional” y advertía que
continuaba como “un problema de salud establecido y persistente” al nivel de
los países. Asistíamos al cierre de la trama narrativa y práctica que organizó
las respuestas sanitarias globales de lucha y control viral y que mostró el peso
de la construcción hegemónica de la pandemia como un problema biomédico
pasible de ser resuelto en el campo de las biotecnologías y de la mano de las
corporaciones de investigación médica y farmacéutica y en particular de
producción de vacunas.
Con el impulso de los nuevos desafíos y las viejas discusiones reactualizadas
ante la pandemia por COVID-19, los trabajos antropológicos en América Latina
y el Caribe han procurado captar las diversas escalas, las diversas
configuraciones y temporalidades de las respuestas ante la producción
multiplicada de enfermedad, sufrimiento y muerte en nuestra región.
Retomando la tradición de estudios antropológicos y sociohistóricos sobre
enfermedades y epidemias, la pandemia ha sido una lente para comprender
modos de gobierno contemporáneos, formaciones de poder, las maneras en
que las posibilidades de vivir, enfermar y morir se distribuyen desigualmente a
partir del acceso diferencial a recursos socio-sanitarios y las condiciones de
vida y la centralidad de los cuidados domésticos y comunitarios. Como se ha
dicho, la infección por el SARS COV 2 y las enfermedades asociadas al
desarrollo de la COVID-19 se produjeron sindémicamente con otras
condiciones biológicas, sociales, económicas y políticas, proponiendo o
reponiendo conceptos como -precisamente- sindemia, epidemias múltiples,
“multidemia”. Desde allí se discute el propio concepto de fin de epidemia o
“pospandemia” para referir a la multiplicidad de los fines de la pandemia en
diferentes lugares, para diferentes grupos y sujetos, y la multiplicidad de
marcas y heridas que dejaron la enfermedad, el sufrimiento, las muertes y los
diversos modos de intervención política.
En esta mesa de trabajo proponemos abordar el conjunto de transiciones
económicas, políticas, técnicas y sociales que abarcan y, en alguna medida, se
suceden a través de las epidemias e involucran a estados y poblaciones,
actores gubernamentales y no gubernamentales, políticas globales e
instituciones locales, profesiones, trabajadorxs y grupos de afectadxs, personas
y subjetividades. Para ello propiciamos el intercambio de reflexiones
antropológicas en curso sobre distintas epidemias: COVID-19, VIH-sida,
tuberculosis, la llamada epidemia de padecimientos mentales, entre otras y un
diálogo desde una perspectiva latinoamericana.
Es nuestro propósito debatir en torno de las preguntas, conceptualizaciones y
estrategias metodológicas que se vienen generando en la práctica de la
antropología en nuestros países frente a estos nuevos/viejos problemas. A la
vez reflexionar sobre las alternativas abiertas para la relación con otros campos
de producción de conocimiento y la elaboración de políticas públicas.