En las actuales condiciones climáticas y de expansión neoextractivista, la ocurrencia de incendios en
áreas rurales se ha convertido en un tema crítico, traspasando las discusiones técnicas y académicas y
llevando a movilizaciones sociales e intensas discusiones políticas.
En América Latina han prevalecido los enfoques que tienen por objetivo la supresión del fuego. Esto se
ha consolidado en acciones administrativas que prohíben, condicionan y penalizan prácticas de quemas,
bajo la premisa de “fuego cero”. Este tipo de políticas de suponen que toda expresión del fuego tiene
consecuencias negativas para el ambiente, sin establecer distinciones entre distintos tipos de usos del
fuego, muchos son hechos por comunidades indígenas, caboclas, campesinas, etc, con lo cual las
políticas de fuego cero afectan la vida de estas comunidades, sin considerar los usos y saberes
tradicionales. Si bien este tipo de políticas están destinadas sobre todo a conservar el ambiente, al no
establecer distinciones terminan por afectar y ser una nueva fuente de invisibilización e incluso
expulsión de comunidades tradicionales.
En América Latina, durante las últimas décadas los fuegos se han reconfigurado debido a procesos de
acaparamiento de tierras, expansión de proyectos neoextractivistas vinculados al agro negocio. En
muchas regiones, la demanda de políticas de supresión cobran creciente fuerza, aunque a pesar de la
costosa inversión en recursos humanos y despliegue técnico, estas políticas no se muestran
suficientemente efectivas. No menos significativo, estos enfoques, han tendido a excluir los
conocimientos y prácticas locales tradicionales sobre el fuego, que no solo son forman parte de las
formas de vida de comunidades locales, también son centrales en la permanencia de los territorios de
vida, algo que se vuelve más significativo frente a las amenazas del cambio climático.
En esta mesa se propone analizar diversas perspectivas sobre los fuegos, cuestionando si considerar que
el fuego en singular es una mirada que suprime y homogeniza las prácticas sociales. Aquí proponemos
discutir las dimensiones políticas de “el fuego”, las formas en que se moviliza el discurso público, y cómo
es catalizador de debates sobre el desarrollo en América Latina. Pero también ver las perspectivas
locales sobre el fuego, y las políticas de supresión, así como las alternativas de manejo integral del
fuego.